Raros en el rock volumen III: Las gafas

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 Tras los posts dedicados a dos instrumentos como el violonchelo o la mandolina, he considerado necesario ofrecerle a las gafas el lugar que les corresponde en la música, puesto que no valdría de nada saber tocar muy bien la guitarra, si no la encuentras momentos antes de entrar en el escenario, o no ver lo suficiente para que ese tomate maduro no te impacte en toda la jeta.

 Para el que piense que las gafas no son instrumentos musicales, permitidme ofreceros la definición que de la palabra nos da el diccionario de la RAE:

instrumento.

(Del lat. instrumentum).

 

1. m. Conjunto de diversas piezas combinadas adecuadamente para que sirva con determinado objeto en el ejercicio de las artes y oficios.

Si la explicación no te ha convencido, ve a la página 47. Si por el contrario, te la has tragado, ve a la 59.

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  La verdadera razón de que haya propuesto las gafas como instrumento de música es que pensaba hacer la entrada sobre el ukelele…

 

 …pero solamente he encontrado tres artistas conocidos que lo toquen con más o menos asiduidad, así que he tenido que improvisar una absurdo argumento para poder mantenenerme en mis trece.

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 Ingleses, americanos, un irlandés, ¿pero dónde narices están las gafas en español? Pues aquí mismo. Hablar de gafas en España es hablar de dientes, de las gafas y dientes de Pedro Guerra. Huesos se llama esta canción:

 

  Del post de la semana pasada, sale Deus, el cantante de los We are Standard, que no pongo para no repetirme, y otro líder de un grupo bastante desconocido al que yo le tengo muchísima admiración por su estilo de música y por sus letras bastante irónicas. Son Sr Mostaza, y el videoclip se llama «ahora comprendo bien»:

 

  Por aquí el enlace al su space y a su web:

 Al Bunbury y al Calamaro los vamos a obviar porque son cuatrojos de bote, puesto que llevan gafas de sol, supongo que para esconderse de las gafas o qué se yo.

Si te ha gustado el post de hoy,  pasa a la página 68. Si, te ha gustado mucho, ve a la página 89. Y si no te ha gustado, ¿porqué has llegado hasta el final? ¿Es que no tienes nada mejor que hacer?

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 Las gafas siempre han sido objeto de mofa y burla, a pesar de tratarse simplemente de un objeto de cristal y metal que no hace otra cosa que facilitar la visión a aquellas personas que lo necesitan. Supongo que lo de la burla es solamente un instinto irrefrenable de miedo a lo diferente (si te pillaban con gafas en la Edad Media, se te caía el pelo, o más concretamente, se te quemaba en la hoguera junto al resto de tu cuerpo).

 Supongo que algo habrán influído estas dos razones para que las gafas hayan estado vetadas en el mundo de la música. No tengo datos sobre el porcentaje de la poblacíon que lleva gafas o lentillas, así que voy a decir el 10%, que es una cifra que sirve para todo.

 Pero la triste realidad es que todos sabemos que lo de no llevar gafas en el escenario se debe a una cuestión de imagen, no se vaya a pensar la gente que eres más listo que ellos, o que, Dios no lo quiera, estés incitando a la lectura.

 Afortunadamente, siempre ha habido gente que ha ido en contra de la vertiente mayoritaria, y gracias a esos héroes hemos conseguido un mundo mejor para los deficientes visuales.

 Nadie sabe quién fue el primero que osó llevarlas puestas en un escenario, pero el primero que me viene a la mente es Buddy Holly, alias el antiapartheid de las gafas de pasta, y cuyo accidente mortal de 1959 dejó al mundo sin la mayor estrella pop hasta la fecha, (también es verdad que hacía bastante poco que se hacía música pop).

 En cualquier caso, su muerte nos deparó homenajes tan reconocidos como la famosa canción American Pie, de Don Mc Lean, o el título/homenaje de otro grupo con gafas. Los Weezer y Buddy Holly. Atención a la aparición estelar de Pat Morita en el 2:42 :

 Los más listos se habrán dado cuenta de que el cantante (Rivers Cuomo), no lleva gafas en el vídeo. Eso era por las presiones de sus asesores de imagen, y porque en la tele de la época en la que se recrea el vídeo (los 50), solamente podían llevarlas los contables y la madres, por ese orden. Afortunadamente, Rivers supo sobreponerse a la penalidad de no ver tres en un burro y ha protagonizado grandes canciones y grandes vídeos, como Dios manda. Hash Pipe (por cierto, que esta canción estuvo a punto de ser versioneada por los fatalfary, pero la torpeza de su bajista para cantarla y tocar el bajo al mismo tiempo dio al traste con el experimento):

 Y si el vídeo de Buddy Holly iba sobre una supuesta serie de televisión, los siguiente portagonistas se dieron a conocer por ponerle la cabecera musical a una de mis series favoritas, Malcom. Son They might be giants y la canción en cuestión se llama Boss of me:

 Y de una serie de la tele pasamos a una película de la gran pantalla. Con un look aproximado al cantante anterior, tenemos al gran Elvis Costello (el de las gafas y la guitarra) y al otro gran Burt Bacharach (al piano), junto a las gafas de Austin Powers en «I´ll never fall in love again»:

 Si Austin Powers hacía apología de su nacionalidad inglesa, el siguiente de la lista es otro inglés con gafas que también hacía apología de otras cosas, principalmente de la paz y los porros, con canciones tan buenas como ésta. John Lennon y «Jealous Guy»:

 Pero el más grande músico con gafas es precisamente el que menos las necesita, puesto que se ve menos que un pimiento. ¿Qué cómo puede ser esto? Pues porque es Esteban Maravilla, aunque le gusta más que lo llamen Stevie Wonder, uno de mis artristas favoritísimos. «Superstition»:

 Supongo que habrá gente que eche de menos en esta lista a gente como Bono o Elton John, pero como musicalmente no es que me gusten mucho precisamente, pues pongo un par de fotos orientativas y lo dejo de momento.

Si ya has tenido suficiente post por hoy, ve a la página 68, pero si quieres seguir leyendo cosas interesantes sobre los músicos, patillas y lentes de contacto, pasa a la página 54:

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 Chao.

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 Buenas (o buenos). Hoy, en el blog «Fatalfary: Elige tu propia lectura», tenemos dos posibles introducciones para el post:

Si quieres una explicación razonada del porqué del título, ve a la página 21. Si, por el contrario, quieres conocer la verdadera razón del título, ve a la 47: